RESTAURANTE LA AQUARELA, TODA UNA EXPERIENCIA

Hoy estamos de celebración por aquí, el mejor marido (que es el mío :D), está de cumpleaños, y como lo de celebrar los lunes es un poco complicado, decidí adelantar un poco la ocasión e invitarlo a uno de los restaurantes de Gran Canaria con una estrella Michelin, en este caso La Aquarela. 

Reservamos bastante temprano, lo cual les recomiendo para que puedan ver cómo anochece y la preciosa luz del sur de la isla (gracias Isabeli y Cristian por este tip). 

Otra recomendación que les hago si es la primera vez que van, es que pidan uno de los menús degustación, así pueden llevarse la experiencia completa de probar muchísimos platos y preparaciones, en los que destacan los productos locales, como el queso de flor de Guía, almendras de Tejeda, pescado fresco, aguacates de Mogán, y un sinfín de ingredientes de primerísima calidad combinados en preparaciones de sabores y texturas que pueden compararse a nada de lo que habíamos probado antes. 

Además, en la situación actual es una ventaja poder comer en una terraza enorme, con distancias enormes entre los comensales y con todas las medidas de seguridad. 

Nada más llegar tomamos una copa de cava junto a los aperitivos, invitación del restaurante, entre ellos unas tostas con mantequilla de aguacate y cilantro, deliciosa, En mi caso, el pan me lo trajeron sin gluten. Y a partir de ahí, todo el menú fue sin gluten. 

Nosotros pedimos el menú Experiencia, que consta en primer lugar de varias elaboraciones referentes a "Nuestro Mar" con platos con ventresca de atún, camarón, vieja y jurel que pueden ver  en estas fotos. 

A continuación suprema de pichón de Caserío con piña y vainilla. Después Bogavante con remolacha a la sal y noisette, antes de pasar al pescado, en este caso cherne con socarrat, como plato principal un taco de vaca frisona con ragú de champiñones y mostaza. 

Para el postre, me prepararon uno especial sin gluten de queso con arándanos y violeta...espectacular, para Alex era helado de masa madres-haba tonka y luego un xoco-pistacho, maravilloso. Como colofón a la noche tuvieron el detalle de traer al cumpleañero creme brulée con una vela. 

En resumen, un lugar que les recomiendo visiten en alguna ocasión especial, o simplemente cuando quieran disfrutar de una grata experiencia gastronómica. Ni que decir cabe que el servicio fue excelente y pasamos una velada inolvidable. 

El miércoles les enseñaré el look completo en un nuevo post, hasta entonces feliz semana y espero que les haya gustado este artículo diferente a lo habitual, ya me lo contarán en los comentarios.